El Parador de San Marcos sirvió ayer de escenario a la presentación de Tres días para acercarse al arte, una publicación que trasciende el concepto de guía turística para erigirse en un manual explicativo, de lujosa presentación, que de manera sencilla y didáctica pretende descubrir al visitante una ciudad como León, que cuenta con unamplio y rico patrimonio artístico y gastronómico.
La propuesta de la Editorial Everest, que se ha encargado de plasmar sobre el papel el veterano periodista Tomás Álvarez y que ha contado con la colaboración de los Ayuntamientos de León y Astorga, Paradores de Turismo y la Asociación Cultural Rey Ordoño I. Amigos de la Cepeda, introduce al lector en la historia del arte universal, tomando como referencia una ciudad mediana, como gusta calificar el autor a León, donde permanecen en pie ejemplos visibles de todas las épocas, caso del Instituto Bíblico y Oriental, donde se conservan las tabletas de arcilla en las que el hombre se inició en la escritura, bustos de Alejandro Magno o una estatuilla de Isis y Horus, que para Tomás Álvarez constituyen elementos cruciales para el devenir de la Humanidad. Pero la ciudad depara aún muchas más sorpresas al visitante, como son los elementos prerrománicos que alberga el Museo de León, las mejores pinturas románicas que existen en el mundo y que se pueden encontrar en el Panteón Real de San Isidoro, el gótico purísimo de la Seo leonesa, el renacimiento esplendoroso de San Marcos..., en definitiva una oferta amplísima y versátil que se cierra brillantemente con la modernidad del Musac, que no deja de ser un premio Mies van der Rohe, algo así como el Nobel de la arquitectura, recordó el periodista.
Para el ex director de la agencia Efe en León estamos tan cerca de las maravillas que no las valoramos en su justa medida.Tanto es así, aseguró, que viajamos hasta Pisa o Salzburgo, ciudades maravillosas dicho sea de paso, y quedamos obnubilados, pero esta ciudad también es para obnubilarse, insistió Álvarez, que realizó una encendida defensa del modelo de ciudad mediana que representa León y que en nada tiene que envidiar a las ya citadas Pisa o Salzburgo, a Reims, Estrasburgo o Basilea, ciudades hechas a la medida del hombre, ciudades paseables y en las que registras el pálpito de la historia, en las que denotas cómo ha ido evolucionando la estética del hombre.
Tomás Álvarez recordó que la idea de realizar este manual explicativo, que no pretende ser ni una guía turística ni una historia del arte, surgió durante una tarde de estío sentado en una terraza a orillas del Bernesga en el parador donde tuvo lugar la presentación. Allí hablamos de las perspectivas turísticas de León, pero yo quise centrar la conversación en el soberbio contenido histórico y artístico que Paradores tiene en toda España y especialmente en León, que goza de un entorno magnífico para crear una oferta capaz de seducir a la gente que le interesa aprender el arte, con un cliente objetivo como el burgués que no ha tenido estudios especializados y una oferta consistente en el arte de todos los tiempos y la gastronomía del noroeste de España.
El autor reconoce que hizo una pequeña trampa en el libro para asociar Astorga, argumentando dos razones que tienen que ver con la inmediatez y la complementaridad. Aquí en San Marcos podemos encontrar unas estructuras magníficas de arte del renacimiento, pero resulta ideal si lo complementamos con una visión de Gaspar Becerra, el mejor imitador de Miguel Ángel en el arte español, que tiene en Astorga su obra más maravillosa. Podemos encontrar elementos del barroco en un retablo de Tomé en la iglesia de los Capuchinos, pero lo mejor de este estilo se halla en la portada de la Catedral de Astorga, que sólo es comparable a la Obradoiro de Santiago de Compostela.
Tomás Álvarez confiesa que sus conocimientos del arte no le vienen de los libros, sino de la experiencia de haberlo vivido en cada ciudad que ha visitado, por lo que ha concebido Tres días para acercarse al arte como un gran reportaje en torno al mundo del arte, examinando los lineamientos generales de cada época y los ejemplos particulares que vamos a poder ver en nuestro entorno, sin caer tampoco en una visión chauvinista del arte en León, porque viendo la bóveda del Panteón Real de San Isidoro estamos viendo la mejor pintura del románico universal y porque contemplando la Catedral de León estamos descubriendo el gótico más universal.
El autor estuvo arropado en la presentación por el presidente de Paradores, Miguel Martínez, el alcalde Francisco Fernández y el presidente de Everest, José Antonio López. El primero, en calidad de anfitrión, tildó la obra de verdadera exaltación de los atractivosartísticos que encierra esta provincia. El regidor tiró de estadística para informar que el número de visitantes a la ciudad se incrementó un siete por ciento en 2010 respecto al año anterior. Por último, el editor destacó que la obra está escrita desde el conocimiento, el sentimiento y el placer.